Gala Lírica

Cada una de las dos partes que componen el programa de esta noche aparece precedida por una pieza instrumental que cumple la función de introducción, pero, a la vez, de preparación para la inmersión en el desarrollo emocional del argumento operístico. Abre la primera parte el Prólogo a I pagliacci de Ruggiero Leoncavallo. Tonio, bufón de la compañía de actores ambulantes, se presenta a sí mismo y adelanta el argumento del drama en un guiño al Tadeo de la Comedia del Arte y, a su vez, invocando el rol de narrador heredado del teatro griego. El dramatismo que se intuye ya de su intervención resulta consustancial al verismo italiano, género en el que se inscribe la obra.

Y es que la escena italiana de mediados del siglo XIX se mantuvo muy vinculada a los movimientos políticos y sociales que agitaban las calles y proclamaban a Giuseppe Verdi como líder de sus reivindicaciones. Resulta significativo en este sentido el empleo del acróstico formado por las letras de su apellido como grito a favor de la unificación italiana (Vittore Emmanuele Rè Di Italia). Los argumentos de Verdi, aunque situados frecuentemente en lugares y tiempos remotos, sugieren imágenes afines a este movimiento. Es este el caso de la enérgica obertura de La forza del destino, simbólica también en los elementos argumentales.

El Fausto de Goethe gozó de un enorme éxito tras su publicación y hoy sigue considerándose un epígono de la literatura alemana. Pronto se tradujo a otros idiomas y la teatralidad de su trama, unida a los elementos mágicos y espirituales, demostró que resultaba idónea para su adaptación operística. En esta aria de Margarita (Ah je ris de me voir si belle en ce miroir, o “Aria de las joyas”), la protagonista da expresión a un proceso de reflexión interna que le lleva a mutar la propia percepción de sí misma. La imitación vocal de la risa se logra a través de determinados ornamentos y motivos melódicos reforzados por la orquesta.

Giacomo Puccini desarrolla un estilo vocal muy próximo al recitado al comienzo de la célebre aria de Cavaradosi, E lucevan le stelle. El ritmo acéfalo, la entonación al unísono de cada una de las células melódicas y la alternancia de valores largos y breves caracterizan la primera sección de esta pieza. En cambio, Puccini despliega una gran expresividad a través de la interválica y los arcos ascendentes segunda sección del aria, en la que el protagonista, desesperado, entona un canto de despedida de la vida al despuntar el alba del día de su ejecución.

La belleza de la Meditación ha propiciado su fama como pieza independiente a través de numerosas transcripciones y adaptaciones. Se trata de un intermedio instrumental de la ópera francesa Thaïs. La instrumentación original, con el violín como solista, simboliza la meditación amorosa de la protagonista, pero la indicación que encabeza la obra (Andante religioso) permite comprenderla también como momento de íntima reflexión espiritual. La melodía se mueve predominantemente en el registro agudo y la amplitud de los saltos exige una afinación impecable y un cuidado dominio del arco.

Sigue el dúo de los protagonistas en La Bohéme, expresión del amor recíproco que han acaban de descubrir. Puccini se inspiró para esta ópera en una serie de viñetas en las que Henri Murger representaba algunas escenas de la vida bohemia parisina. La relación entre Rodolfo y Mimì es el núcleo de su argumento, que sirve a Puccini como punto de partida para elaborar una sentida crítica las dificultades de las clases sociales menos favorecidas, muy especialmente los jóvenes artistas románticos.

Verdi recurre en el Don Carlo de nuevo a un tema histórico para, indirectamente, criticar la situación política que preocupaba a la Italia de su época. La trama está basada en el texto homónimo de Schiller y narra diversos conflictos de la corte española en torno a la figura de Carlos de Austria, primogénito de Felipe II. El aria elegida en el programa de hoy (Dio, che nell’alma infondere) es entonada por el protagonista y por Rodrigo, amigo del infante. La dificultad de este dueto radica en la interpretación simultánea (a distancia de tercera) de una misma melodía en las voces de tenor y barítono, lo que requiere el absoluto acuerdo entre los dos solistas en parámetros técnicos, como la respiración o el vibrato, y expresivos, como el fraseo o la dinámica.

Este Intermezzo de Manon Lescaut cumple una función de transición entre los actos segundo y tercero, siendo a su vez la introducción instrumental a este último. Como tal, adelanta musicalmente la acción del desenlace de la ópera. La pieza se inicia con un expresivo solo de violonchelo, que dialoga con la voz del violín (Lento espressivo); le sigue una amplia sección orquestal (Andante calmo) en la que la melodía, entonada por la familia del viento, es acompañada por un motivo regular en el arpa.

Tu che di gel sei cinta es el aria de Liù al inicio del tercer acto de Turandot. En esta ópera, ambientada en China, Puccini desarrolla un estilo exótico con rasgos propios del lenguaje musical oriental. La utilización de instrumentos vernáculos, escalas y ritmos propios. La recreación de este paisaje sonoro va más allá la mera función documental o de la labor de estudio musicológico del folklore. Puccini se sirve de estos elementos para, imbricándolos en su propio discurso, dotarlos de una función poética al ponerlos al servicio de la trama.

Entre los afanes del Romanticismo artístico, la escapada a paisajes exóticos resultaba una estrategia recurrente. También España, periferia de la cultura centroeuropea, ofrecía un atractivo aliciente para la inspiración literaria y musical. La ópera Carmen de Georges Bizet (representada aquí por el aria Votre toast, o “Canción del toreador”) se sirve precisamente de elementos folklóricos (melódicos, rítmicos, e incluso tímbricos) para la ambientación dramática en Sevilla y la recreación de tópicos profundamente anclados en nuestra cultura.

Vesti la giubba presenta ante el espectador la desesperación de Canio al descubrir la infidelidad de su esposa: este episodio vital de terrible dolor se opone a su atuendo de payaso frente a la próxima función. Aparece una nueva alusión a Arlequín y Colombina mientras, musicalmente, el dramatismo se logra a través de un discurso muy plástico que representa en música la risa, el aplauso o el dolor. El aria exige del tenor una interpretación intensa y visceral con la que involucrar al espectador a través de la violencia de los sentimientos en la representación de esta tragedia tan humana con la que puede identificarse fácilmente.

El Intermezzo de la Cavalleria rusticana de Mascagni es una pieza orquestal de gran lirismo que ejerce un gran contraste con sus elevadas melodías y empastadas masas tímbricas. De carácter predominantemente melódico, la cuerda presenta el tema principal en los violines y lo desarrolla acompañada desde el registro grave. Exige un amplio control del conjunto por parte del director y el dominio del tempo se convierte aquí en clave fundamental de su deleite.

Verdi recurre de nuevo a un tema histórico en Rigoletto. Basada en el texto de Victor Hugo Le roi s’amuse, la ópera se ambienta en la corte del duque de Mantua, en el siglo XVI. Tutte le feste al tempio corresponde al dueto entre Rigoletto, bufón de la corte, y su hija Gilda. Verdi demuestra su maestría en la expresión musical de la tristeza y ansiedad de la muchacha. Nótese cómo la orquestación se pone al servicio del drama, acompañando en dinámica y agógica la carga emocional de la pieza.

Nessun dorma es con seguridad una de las arias más célebres de Puccini y también de la historia de la ópera. El desarrollo expresivo encuentra su culminación en el punto álgido de la melodía, al que se llega desde el registro piano con el que se inicial la melodía. A lo largo del aria, el tenor debe demostrar un amplio fiato, pues su articulación requiere un buen dominio de la respiración y el legato. El punto melódico culminante (el Si natural del registro agudo, coincidente con la palabra “vincerò”) sirve al tenor para manifestar su convicción de triunfo frente a las imposiciones de la corte de la princesa Turandot.

La escena, romanza y terceto que siguen pertenecen al primer acto de Il Trovatore. La primera sección, en estilo recitativo, representa el diálogo entre Inés y Leonora. El cambio de tonalidad acompaña el nuevo carácter de la romanza de Leonora, donde los amplios saltos ascendentes de la voz acompañan las sílabas de mayor expresividad textual. La última sección vuelve de nuevo al diálogo entre los personajes, que intercambian intervenciones en las que la ornamentación y la complejidad de la articulación exigen un buen dominio técnico individual, a la vez que una cuidada interpretación conjunta.

Hevila Cardeña
soprano

Nace en Toledo. Se titula con las máximas calificaciones en el Conservatorio Superior de Canto de Madrid en la especialidad de canto y en la especialidad de Pedagogía del Canto. Estudió magisterio musical en la Universidad de Castilla la Mancha.

Amplía sus estudios en el Centro Universale del Bel Canto en Vignola (Italia) con Mirella Freni, en la “Internacionale Sommerakademie Mozarteum” Salzburgo (Austria) con Edda Moser y en el “Taller de interpretación escénica” con Giancarlo del Mónaco (Madrid).

Es premiada en los concursos: “Primer curso de Canto Ciudad de Cádiz”, “Ángel Vegas” otorgado por Juventudes Musicales de Madrid y Amigos de la Opera, “Fundación Victoria y Joaquín Rodrigo”, XLVIII Curso Universitario Internacional de Música Española, “Montserrat Caballé- Bernabé Martí” de Zaragoza, II Premio Hispánica para jóvenes intérpretes líricos de Madrid y Concurso internacional de Canto de Logroño.

Protagoniza las óperas: “Cosí fan tutte” (Fiordiligi), “Don Giovanni” (Zerlina y Donna Elvira), “Bastien unt Bastienne” (Bastiana), “Gianni Schicchi” (Lauretta), “Scheigt stille, plaudert nicht” (Lieschen), “Il Sacrifizio di Abramo” (Angelo), “Carmen” (Micaela), “Barbero de Sevilla” (Berta), “Boheme” (Mimí), “Il trovatore” (Leonora).

Oratorio: Requiem de W.A. Mozart, Magnificat de J. Rutter, Cantata n° 84 de J. S. Bach, Beatus Vir RV 598 y Gloria RV 589 de A. Vivaldi.

Protagoniza las zarzuelas: “El carro de la muerte”, “El Celoso Extremeño”, “La verbena de la Paloma”, “Luisa Fernanda”, “La corte de Faraón”, “El día de Reyes”, “El Molinero de Subiza”, “A París me voy”, “La del manojo de rosas”, “La tabernera del puerto”, “Barbero de Sevilla”, “Don Manolito”, “Los gavilanes”, “Las de Caín”, “El dúo de la Africana”, “El Huésped del Sevillano”, “El Paraíso de los niños”, “La Marchenera” y “La Dogaresa”. En teatros como el Teatro de la Zarzuela, Teatro Español, Auditorio Nacional, Teatro Monumental, Teatro Nuevo Alcalá, Teatro Fernán Gómez, Teatro Campoamor…

Soprano invitada en el espectáculo de la Fura dels Baus para la conmemoración del Bicentenario de los fusilamientos del 2 de mayo (Madrid).

Enrique Ferrer
tenor

Nace en Madrid. Comienza sus estudios en el conservatorio profesional de Getafe. De la mano del Maestro José Ramon Martínez Reyero comienza sus primeros contactos con el canto en la apenas fundada Coral Polifónica de Getafe. Alentado por el Maestro Reyero audiciona en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid donde comienza estudios en la Cátedra del Maestro Pedro Lavirgen con el que aún tiene un vínculo muy estrecho.

En breve es becado en la Academy of Vocal Arts de Filadelfia donde se gradúa en arte lírico bajo la tutela de Christopher Macatsoris y Bill Schuman perfeccionándose posteriormente en Madrid y Milán con el Maestro Vincenzo Spatola.

Ha sido premiado en varios concursos de canto como el de Logroño, Jaume Aragall en Barcelona, Ernesto Lecuona en La Habana y Luciano Pavarotti en Filadelfia.

Desde muy temprana edad es un cantante asiduo en los principales teatros y auditorios españoles donde desarrolla un repertorio notable tanto de zarzuela como de ópera.

En el ámbito internacional le avalan teatros como el Teatro de la Ópera de Roma, Teatro Carlo Fenice de Génova, Teatro de La Fenice de Venezia, Kennedy Center de Washington, Teatro Rossini de Pesaro, Teatro Massimo Bellini de Catania, Teatro Lirico de Cagliari, Teatro Comunale Alighieri de Ravenna, en la Ópera de Montecarlo, Teatro Châtelet en Paris, en las Operas de Montpellier, Lyon, Rouan, Versalles, Estrasburgo, en la Ópera de Colonia , sala Tchaikovsky en Moscú así como en la prestigiosa Carnegie Hall de Nueva York entre otros muchos.

Obtuvo una extraordinaria acogida tanto de público como de crítica en la Ópera de Guangzhou en China con una producción de Carmen del Covent Garden de Londres dirigida por el Maestro Daniel Oren.

Notoria fue la gira de la Ópera La fanciulla del West de G.Puccini por toda la región Toscana.

Ha cantado en festivales de ópera como la Arena de Verona, el Festival Giacomo Puccini de Torre del Lago, el Festival Internacional de Ópera de Aspendos o el Festival Internacional de Música y Danza de Granada.

Ha colaborado con el sello discográfico 𝐷𝑒𝑢𝑡𝑠𝑐ℎ𝑒 𝐺𝑟𝑎𝑚𝑚𝑜𝑝ℎ𝑜𝑛 en el disco de Zarzuela Viva Madrid y realizó para el sello discográfico Bongiovanni la grabación en DVD de la ópera La leggenda di Sakuntala de F.Alfano realizada en directo en el Teatro Massimo Bellini de Catania.

La próxima temporada formará parte del elenco en el estreno mundial de la Zarzuela “Trato de favor” del Maestro Lucas Vidal y libro de Boris Izaguirre junto a la soprano Ainhoa Arteta en el Teatro Lírico de la Zarzuela.

Antonio Torres
barítono

Nacido en Málaga, donde estudió en su Conservatorio. Ha cantado en los principales teatros nacionales. También en Europa, Latinoamérica y Estados Unidos.

En ópera ha cantado en L’Elisir d’amore, La Flauta Mágica, Rigoletto, Carmen, Gianni Schicchi, Romeo y Julieta, Macbeth, La Cenerentola, Tosca, La Traviata, Bastián y Bastiana, Mariana Pineda, The Telephone,El Murciélago, L’incoronazione di Poppea, La Viuda Alegre, Pepita Jiménez, Turandot... Fue Bion, en el estreno en España de la ópera homónima de Méhul. Entre sus estrenos absolutos, las óperas Amor Pelirrojo y Zamarrilla bandolero.

En concierto destaca su participación en Carmina Burana (Orff); Misa en RE, op.86 (Dvorak); Requiem (Mozart); Der Messias (Händel); Cantata Manriqueña (Prieto); Oratorio de Navidad (Palazón); El Retablo de Maese Pedro (Falla); Stabat Mater(Rossini); Novena Sinfonía (Beethoven); Réquiem(Fauré) Octava Sinfonía, (Mahler), grabado en DVD para EMI Classics. En Lima (Perú), protagonizó como don Alonso, con gran éxito, el estreno absoluto para América de La Venta de Don Quijote (Chapí).

En el género de la zarzuela ha protagonizado la mayoría de títulos del repertorio, llevando el género lírico español también fuera de nuestras fronteras: Nueva York, Colombia, Perú, Ecuador, Guatemala, Portugal, México, Francia, Lituania...

También ha protagonizado musicales como: Sweeney Todd, El Hombre de la Mancha, Oliver Twist y la gira de la versión de Carmina Burana con La Fura dels Baus. Como director escénico, ha dirigido diferentes títulos líricos dentro y fuera del país.